Sobre oxígeno y gremlins

Cuando bajo al Sur, el acento se me pega en el minuto 1. Eso es así. Y el pimiento es "asao".

Lo del acento es curioso, porque por lo visto abandono el mio (el cual creía inexistente) y adopto uno con toques andaluces. Entre malagueño y cordobés. O algo. Y yo que siempre creí que yo hablaba "bruto"!
Y luego te dicen que acento "barreño" también. Jarl. La primera vez pensé: "-Será porque tiene tono metálico". Pero resultó ser por el pueblo. Lástima; con lo que me gusta Bender...

En cuanto al trayecto, viendo en el avión las instrucciones en caso de emergencia (y no pienso entrar al trapo de si son incoherentes, absurdas o lo que sea; La verdad la tienen en "The Fight Club") no pude evitar identificarme con el tipo que se pone la mascarilla de oxígeno. Lo necesitaba. El bajar al Sur, digo. Te tratan bien (mucho), lo pasas en grande y desconectas enseguida. Además, amplías conocimiento gastronómico con manjares autóctonos (kebabs, nachos, burguers...) y rememoras clásicos de su música popular (Ai se eu te pegos, Rihannas y Gagas de turno).

La cosa es que para no variar, fue genial. No podía ser de otra manera. Te llaman guapo (insensatos), te besan, te abrazan. Todo gratix, of course. Por no hablar de que bebes más que María Jiménez en la despedida de soltera de Massiel, pero esa es otra historia.

Obviamente no puedo más que agradecer a la gente del lugar su buenrollismo y calidez en el trato. Desde los habituales (igual leéis esto si el APM? no os absorbe), a peques merengues con mucho arte, shakiras a 4 patas (no seáis malpensados), pasando por jugadoras de trivial, jefes con rebeca, Novias en mayúscula o ladronzuelas descaradas de zumo de cebada.

El Sur es lo que tiene. Mola. Y no sólo eso, sino que se contagia su buen arte (y no, no me llevo comisión de ningún tipo). De hecho, al volver del aeropuerto y escuchar música en el coche de mi progenitor, me da la sensación de que me conozco todas las canciones que suenan por RTT. Hay cosas peores, no? Decidme que sí, por favor...

Dicho ésto, sólo me quedan lugar para una reflexión. En el viaje de vuelta, en el avión me tocó ala. No problemo, después del muslo y la pechuga es lo que más me gusta. La cosa es que no podía dejar de mirar por la ventanilla e imaginarme la imagen que os dejo a continuación. !Eso es un gremlin! ¿Empezaré a sufrir visiones?

Por cierto, enorme homenaje simpsoniano a "The Twilight Zone". Tampoco se lo pierdan.